ABAJO… Ya lo han alertado, incluso la propia Secretaría de Turismo. La sobreoferta de condominios en el Caribe mexicano podría facilitar el desplome de las ventas de bienes raíces en este rubro. Al mismo tiempo, esta desaceleración en el sector inmobilia-rio reflejaría la mala planeación en el destino con la saturación de inversiones con vocación turística y expondría los riesgos al envejecimiento prematuro. Tema complejo y harto espinoso, que en todo caso tendría que tomar en cuenta la autoridad municipal, que en el caso particular de Cancún parece tenerle sin cuidado. Zona Hotelera sufre de una saturación de centros de hospedaje, que empieza a permear en servicios, en congestionamientos viales, e incluso en el medio ambiente, y no hay freno, ni intención de ponerlo, tanto que ya se anunció sin ningún tapujo otro desarrollo condominal independiente a los ya en proceso de desarrollo (Lahia, Malecón Cancún, La Herradura, Riviera Cancún, Puerto Cancún, Bay View Grand, Lagoon Lofts y Emerald).
Se trataría de uno bajo el brazo ejecutor del grupo empresarial de la familia Ballesteros en el predio que actualmente ocupa El Embarcadero. Particularmente en este caso el tema no es per sé este crecimiento inmobiliario aún con las aristas que de éste se desprenden. Tampoco en sí mismo el desarrollo de los Ballesteros, sino la falta de regulación, de planeación, de visión, de conciencia, partiendo que ha sido el propio alcalde de la ciudad quien lo dio por sentado públicamente aún sin la conclusión de la tramitología que en este momento se encuentra en proceso. Y ese es el real riesgo.
Es cierto, la inversión es irremediablemente nece-saria y parte del proceso de desarrollo. Sin embargo, el promoverla de manera irresponsable es un atentado contra un destino exitoso y que pende de sus atributos ambientales en toda la extensión de la palabra.
n n
ABAJO… La noticia de la venta del predio de El Embarcadero ha tomado por sorpresa al empresario Miguel Quintana, con el 50% de la propiedad, y con cierto descontento tratándose de una robusta inversión la que ha inyectado para poner en funcionamiento El Teatro de Cancún, la torre panorámica y el Museo de Arte Popular Mexicano que ahí operan desde inicios del 2000. Pero como empresario reconoce la valía del terreno que en realidad no es rentable, vaya, ni el muelle mismo. Reconoce el hermetismo de los Ballesteros con respecto al proceso en la gestión del cambio de uso de suelo, como también de su intención de no poner resistencia al nuevo proyecto, aunque para ello tendrá que haber un planteamiento para convenir en intereses por ambas partes, ya sea con la venta de su paquete accionario o como socio de resultar aprobado el proyecto.
n n
EN MEDIO… En otro orden de ideas pero sobre lo mismo. Miguel Quintana no desiste en el tema del home port, del cual ha obtenido los permisos de mayor complejidad a nivel federal, como el de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y el de la Semarnat, al haber cubierto sin contratiempos los requerimientos previstos por ambas dependencias. Sin embargo, no logra concluir con éxito el del municipio de Solidaridad. Pero tiene confianza de concretarlo, más aún de aprobarse en San Lázaro el impuesto a cruceros, del cual el 80% recaería en las arcas del municipio.
n n
EN MEDIO… Resultó certero el rumor de la intención del grupo American Property Management Corp., comandado por Miguel Gallegos, por adquirir parte del paquete accionario del hotel boutique Paraíso de la Bonita, de Carlos Gosselin, en su proceso de expansión en el Caribe mexicano, que iniciase con la adquisición del hotel Le Méridien. Sin embargo, las negociaciones, muy adelantadas por cierto, cayeron en el último momento al no llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
Gosselin tiene la intención de hacerse de un socio para dar soporte financiero a su ambicioso complejo golfístico residencial turístico que habilitará en la ciudad de Mérida; ofertas aún tiene en puerta pero ninguna tan cercana a su pretensión.
n n
ARRIBA… A dos años de Wilma, cuya repercusión tuvo grandes estragos en su infraestructura y en sus finanzas, el hotel Aqua Cancún reingresará a la oferta hospitalaria para diciembre entrante con una reinversión de 50 mdd.
Este continuará bajo la operación de Grupo Posadas, conducido por Gastón y Pablo Azcárraga, aunque han determinado mantenerlo como rúbrica independiente a la marca Fiesta Americana, conservando su concepto de “lujo descalzo”, su inventario y su insignia gastronómica de celebrity chef.
n n
ARRIBA… Con una inversión de 12 millones de dólares, la empresa Dolphinaris, de Bernardo Zambrano, inauguró en Cozumel su segundo delfinario en el Caribe Mexicano, a cuatro meses de abrir con éxito su primera locación, Dolphinaris Cancún, cuya inversión rondó los ocho millones de dólares.
El complejo acuático turístico sustentable fue abierto en el marco de la XIV Convención Anual de la Asociación de Cruceros de la Florida y el Caribe (FCCA por sus siglas en inglés), con la presencia de 100 asociados, que incluyen presidentes de navieras, ministros de gobierno y empresarios más prestigiados del Caribe, de la cual Dolphinaris es miembro.
Dolphinaris opera en una superficie de siete mil 500 m2, con caletas de dos mil metros cuadrados, y 13 delfines –tres de las cuales son crías nacidas en cautiverio en Dolphinaris Cancún- para su programa de nado.
Inversiones como ésta no sólo contribuyen a fortalecer la oferta turística de Cozumel, considerado el más importante destino de cruceros de México y el mundo, sino a la generación de fuentes de empleo, 120 nuevas originadas en la vecina isla.
