La Ciudad de México, un destino para vacacionar

por Redacción

A finales de junio, el secretario de Turismo de la Ciudad de México, Miguel Torruco Marqués, rindió una especie de informe sobre lo que se ha hecho en la dependencia a su cargo durante los primeros seis meses de gestión, así como de los resultados obtenidos en la materia en el primer cuatrimestre del año.

Desde que inició la administración de Miguel Angel Mancera como Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Torruco ha andado muy activo recorriendo las Delegaciones Políticas de la metrópoli, junto con los jefes delegacionales de cada una, para conocer in situ la problemática, atractivos y necesidades de las 16 regiones que conforman la capital.

Hasta el momento ha visitado ya más de diez demarcaciones, a pesar de que sus recorridos se vieron un poco retrasados debido a que se fracturó el peroné por resbalarse al tirar un penalti en el estadio Azteca, precisamente durante su gira por Coyoacán. “Pero lo metí”, bromea y al mismo tiempo presume: “Ni con la pierna rota falté un solo día a trabajar”. Calcula concluir las 16 delegaciones en este mes.

De todo lo que ha informado este funcionario durante los últimos días, más allá de los indicadores turísticos básicos, que en su gran mayoría arrojaron resultados positivos durante el periodo enero-abril de este año, lo que hay que mirar es qué sucedió para que esos resultados positivos se dieran.

De entrada, permitió que hubiera continuidad en su dependencia. “Siempre he criticado la curva de aprendizaje y el síndrome de la planeatitis aguda; por eso no llegué para poner en los principales puestos a mis amigos o vecinos, por eso ratifiqué a la mayor parte del personal”, ha comentado. Y mientras trabaja en la reestructuración de la propia secretaría a su cargo, cumplió las órdenes de Mancera quien le instruyó que creara la Comisión Ejecutiva de Turismo, la Comisión Interdelegacional y el Consejo Consultivo de Turismo, el cual, afirma, sí funciona, porque a diario habla y consulta con uno o varios de sus miembros.

También lanzó rápidamente varios programas: “Disfruta Ciudad de México”, para los turistas en general; otro dirigido a los adultos mayores y uno más de Turismo Social: “Sonrisas por tu Ciudad”.

Según explica él mismo, la implementación de estos programas es lo que hizo que el indicador de turismo doméstico tuviera un salto significativo, ya que creció en 8.2%, al llegar a los tres millones 333 mil visitantes. No obstante, en cuanto a turistas extranjeros -el único indicador con registro negativo-, se tuvo una baja marginal de 0.7%, con la llegada de 739 mil visitantes. Sin embargo, hay que hacer notar que a pesar de los warnings del Departamento de Estado de la Unión Americana, el arribo de viajeros estadounidenses, con 280 mil, se elevó18.7% con respecto al mismo periodo de 2102.

Empero, Torruco sostiene que no le preocupa este leve descenso en turistas internacionales debido a que todavía están por venir las temporadas más altas en cuanto a flujo de visitantes.

Finalmente, en los dos indicadores más importantes: el de turistas totales y las divisas, le fue bien. En estos cuatro meses se recibieron más de cuatro millones de visitantes, con un incremento de 6.4%, que generaron una derrama económica de mil 447 millones de dólares, lo que representa un alza de 10.5%. Nada mal para un arranque de año.

En el informe de Torruco también aparece un dato que no hay que dejar pasar: los fines de semana.

Uno de los problemas crónicos de la Ciudad de México es que lo grueso de su ocupación hotelera se sostiene sobre los viajeros de negocios, que de lunes a jueves mantienen una ocupación hotelera superior al 60%, pero ésta se desploma por abajo del 50% los fines de semana. Encontrar la manera de retener un par de días más a esos ejecutivos para que se queden a disfrutar de la ciudad es uno de los mayores retos que han enfrentado todos los secretarios de Turismo que ha habido en el DF, y, hasta la fecha, ninguno ha podido.

Por esto es significativo que Torruco informe que si bien en general la ocupación hotelera  llegó a 61% en el lapso de referencia, creciendo 7.3%, este incremento se debe, principalmente, a que aumentó la ocupación durante los fines de semana.

La administración de Miguel Torruco al frente de Sectur DF, a juzgar por este primer corte de caja, va bien. Habrá que ver cómo se desarrolla el resto del año. Esperemos que las cosas le sigan funcionando y termine 2013 superando las metas que se marcó: la visita de doce y medio millones de turistas y una derrama de 4,207 millones de dólares.

Pero, sobre todo, la expectativa siempre estará en comprobar si logra poner a la Ciudad de México en el camino de su gran meta: sembrar en la mente de los viajeros, tanto nacionales como extranjeros, que la capital del país tiene suficientes atractivos como para convertirse en un destino para vacacionar.

[editor]Gustavo-Armenta[/editor]